Nos preocupamos tanto a veces de las relaciones que tenemos con la gente de nuestro alrededor. Que todo fluya, que haya buen rollo, todo en el intento de caer bien.
Y por contra no nos ocupamos de lo realmente importante, de la relación que tenemos con nosotros mismos. Nosotros que somos nuestros críticos más exigentes y no podemos poner distancia de lo que sentimos, como haríamos con alguien que no quisiéramos en nuestra vida.
No nos queda más remedio que perdonar los errores cometidos, aceptar e intentar minimizar nuestros defectos y por encima de todo, debemos encontrar siempre la manera de amarnos, incluso en los momentos en que somos mas vulnerables, que estamos más irascibles y no podemos estar a la altura de lo qué quizá se espera de nosotros.
Como todo en la vida es bueno empezar a vernos a nosotros mismos, quizá eso nos ayude a ser más tolerantes con los demás.
P.D. No siempre podemos ser ”super estupendos" 🤷🏻♀️
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