2024/07/07

NO TE QUIEREN PERDER, PERO TAMPOCO QUIEREN NADA CONTIGO*

 NO TE QUIEREN PERDER, PERO TAMPOCO QUIEREN NADA CONTIGO*

Muchas veces, nos cuesta tanto el poder decirle adiós a esa persona...que nos está destruyendo por dentro. Ya sea tu novia, tu novio, tu espos@, sea quien sea y llámese como se llame.

Y es que somos tan adictos al dolor, a la tristeza, al engaño y a la destrucción emocional... Que no te das cuenta, que la persona que realmente quiere estar contigo, ”no te falla nunca”.

No mereces ser la segunda opción de nadie, no importa que tanto le ames, si es que es amor...lo que realmente sientes.

O quizás, pueda ser una grave adicción de codependencia a la atención de lo ausente.

No mendigues amor de una persona, que sólo te utiliza como escudo emocional, o como objeto.

No le des tu tiempo a alguien, que sólo te da mentiras. No le des tu corazón a una persona, que sólo lo desprecia o le da igual tenerte a su lado o no.

Nadie que juegue contigo...”merece un gramo de tu cariño”.

No existen personas confundidas, lastimadas o marcadas por su pasado.

Así que deja ya de andar pobreteando, limosneando y mendigando amor, rogando cariño y suplicando atención.

Es que, es que, es que.... Es lo más tonto, con lo que pueden iniciar una excusa.

¡ Es que no te quiere y punto final !

Quien ama...”NO” sabe de excusas, ni de enredos, ni falsedades, ni de mentiras.

El mundo está lleno de hipócritas.

Por favor nunca creas en esa persona, que con lágrimas de cocodrilo y falsas palabras...”te jura que por ti cambiará”. Eso solamente sucede en los cuentos de hadas, pero en la realidad “NO”.

Así que por favor, quítate de la cabeza eso de las segundas oportunidades.

Porque si no aprovechó la primera.... ¿Qué te hace pensar, que la segunda si la aprovechará?

*NO EXISTEN PERSONAS CONFUNDIDAS. SINO MÁS BIEN, EXISTEN PERSONAS QUE NO TE QUIEREN PERDER, PARA ÚNICAMENTE SACIAR SUS DESEOS... AUNQUE “NO” SIENTAN NADA POR TI*

*EL DESAPEGO; ES AMAR MÁS Y SUFRIR MENOS. POR ESO, EL PODER AFECTIVO LO TIENE QUIEN NECESITA MENOS DE LA OTRA PERSONA*

*NO INSISTAS EN FORZAR VÍNCULOS....QUE YA “NO” FUNCIONAN*

*LO QUE NO TE HACE BIEN, NO TE HACE MÁS FALTA EN TU VIDA*

Mantener la calma 🌞

 🎈🎈La gente débil, se venga. La gente fuerte, perdona.

La gente inteligente, ignora. -Albert Einstein-


¿Y tú a qué grupo de gente perteneces? Te voy a contar algo sobre esta reflexión de Einstein, que encierra una profunda sabiduría sobre el manejo de los conflictos y las emociones. En ella se contrastan tres maneras de responder ante una situación adversa: la venganza, el perdón y la indiferencia.


👉La venganza, como acto impulsivo motivado por el rencor y la ira, suele ser una respuesta fugaz que no trae soluciones duraderas. Quienes se vengan se enredan en un círculo de dolor y resentimiento que les impide seguir adelante haciéndose un daño terrible así mismos.


👉El perdón, en cambio, implica un acto de fortaleza interior. Perdonar no significa olvidar o convalidar el daño recibido, sino liberarse de la carga emocional negativa y abrir paso a la sanación. Supone reconocer que el rencor solo nos lastima a nosotros mismos, mientras que el perdón nos permite avanzar en paz. Te perdono pero no olvido lo que me has hecho.


👉Por último, la indiferencia no se trata de apatía o falta de empatía, sino de una actitud consciente de no dejarse afectar por las acciones o palabras de otros. Es la capacidad de mantener la calma y la compostura ante las provocaciones, eligiendo no alimentar el conflicto ni darle poder sobre nuestras emociones. En ocasiones, más vale tener paz que razón, y yo te la voy a dar como a los tontos, para que te quedes agusto pensando que la tienes 😅.


En conclusión, esta frase nos recuerda que la venganza es un acto de debilidad, el perdón es una muestra de fortaleza y la indiferencia inteligente es la mejor respuesta ante quienes buscan provocarnos. Es importante no darle a nadie el poder de sacarnos de nuestras casillas y alterar la paz que tanto cuesta tener😎.


Un abrazo de super Rebe..

2024/07/02

PALABRAS...

 

KINTSUGI


Buenos días, familia. En honor al post de las palabras vamos con esta que a mí me encanta.


Kintsugi es un arte japonés también conocido como "carpintería de oro" y consiste en reparar objetos rotos de cerámica con una técnica especial lenta y muy minuciosa. Esta técnica utiliza una resina especial que se mezcla con polvo de oro o plata. Tras la reparación se debe dejar secar, un proceso que puede tardar semanas, incluso meses. 


Esta tradición lo que intenta es hacer honor a otra conocida como Wabi-sabi y que defiende la belleza de las imperfecciones. La cultura japonesa entiende que las cicatrices son parte de la historia y que no debería, en ningún caso, tratar de ocultarse. Más bien al contrario, deberían mostrarse en todo su esplendor para hacer ver la belleza que tiene sus cicatrices.


Es por eso que jamás deberíamos avergonzarnos por nuestros fracasos. Lo que somos es producto de todo lo que hemos vivido, bueno y malo, y si solo mostramos lo bueno a los únicos a los que estamos engañando es a nosotros mismos. Sé feliz y recuerda que tus cicatrices demuestran que has vivido, que alguna vez creíste en algo o alguien.



Ponte tu mejor sonrisa.

 “He dejado de creer en las promesas cuando me prometieron que me llamarían y nunca sonó el teléfono. 

 Me he vuelto más desconfiada cuando me falló quien menos me lo esperaba. He odiado las excusas cuando me pusieron la más absurda del planeta, sin sentido, sin motivo, sin necesidad. 

 He dejado de contar mis cosas a cualquiera cuando me he dado cuenta de que hay quien solo lo quiere saber por curiosear o por conveniencia. 

 Me he vuelto un poco más dura cuando alguien me tomó por tonta. Y me he dado cuenta de que se pilla antes a un mentiroso que a un cojo cuando he descubierto más de una mentira. 

 He olvidado a ciertas personas cuando me di cuenta de que se habían olvidado ellos de mí. Me he vuelto más pasota cuando supe que hay personas que solo aparecen cuando quieren. Y he dejado de sentir cariño por alguien cuando me ha demostrado que no va de frente. 

 Me he vuelto más cuidadosa con lo que cuento cuando me he dado cuenta que cualquiera puede usarlo para lo que sea. He dejado de escuchar tonterías o permitir que ciertas cosas me afecten cuando me he dado cuenta que no merecen la pena. 

 Me he cansado de esperar cuando se fue quien nunca quiso volver. Y he dejado de pensar en los demás antes que en mí cuando me di cuenta de que ellos solo van a su bola, mientras que yo debería ir a la mía”. 



2024/07/01

Nunca una herida sana con un "Lo siento"

 Nunca una herida sana con un "Lo siento"


En la vida, todos enfrentamos situaciones en las que lastimamos a quienes amamos, a veces sin querer y otras, por decisiones que tomamos en momentos de debilidad o error. En esas situaciones, el primer impulso suele ser pedir disculpas, esperando que con un simple "lo siento" podamos arreglar el daño causado. Sin embargo, la realidad es mucho más compleja.

Las palabras, aunque poderosas, no siempre tienen el poder de sanar las heridas que hemos infligido. Decir "lo siento" es un primer paso importante, pero es solo eso: un inicio en el camino hacia la reparación. Las heridas emocionales son profundas y a menudo requieren mucho más que palabras para cicatrizar.

Cuando decimos "lo siento", reconocemos el error y el dolor que hemos causado. Este acto de reconocimiento es crucial porque valida los sentimientos de la otra persona y muestra que comprendemos la gravedad de la situación. Sin embargo, las palabras deben ir acompañadas de acciones concretas que demuestren un verdadero cambio de comportamiento y una intención genuina de enmendar el daño.

Para sanar verdaderamente una herida, es esencial demostrar con hechos que hemos aprendido de nuestros errores. Esto puede incluir un esfuerzo continuo por cambiar las conductas que causaron el daño, ofrecer apoyo emocional y estar dispuestos a escuchar y entender el dolor del otro. Es un proceso que requiere tiempo, paciencia y, sobre todo, sinceridad.

Además, es importante recordar que el perdón es una decisión que corresponde a la persona herida. No podemos exigir ni apresurar su proceso de sanación. Cada individuo tiene su propio ritmo para sanar y encontrar el camino hacia el perdón, y debemos respetar ese tiempo y espacio. 

En conclusión, un "lo siento" es solo el comienzo del proceso de curación. Es una declaración de arrepentimiento, pero la verdadera sanación proviene de un compromiso continuo y sincero con el cambio y la reparación del daño causado. Solo a través de acciones concretas y un esfuerzo genuino podemos esperar restaurar la confianza y sanar las heridas del corazón.



Orgullosa de ser una mala mujer 😌

 Soy una mala mujer… Porque cuando llego se nota y cuando me voy se siente. Soy una mala mujer porque alzo la voz, porque soy independiente, porque no me molesta pagar la cuenta ni abrir mi propia puerta ni cargar mis propios humores, por ello soy una mala mujer.


Porque no me dejo, porque no me quiebro, porque me sacudo las lágrimas me acomodo el escote y sigo para adelante, por eso soy una mala mujer, porque no nací sumisa, callada, quieta y frágil, sino soberbia, entrona y estridente, porque cuando llego se nota y cuando me voy se siente.


No estoy yo para ser ama de casa sino se me antoja, para ser esposa devota o madre abnegada, estoy para vivir, con quien me guste acompañar y sentirme acompañada.


Soy una mala mujer porque varios tequilas me hacen reír mientras otros ruedan por el piso, porque tomo la iniciativa, porque a veces enciendo un cigarrillo.


Se es una mala mujer porque decides mandar al carajo al padre de tus hijos, porque rehacer tu vida, porque no aguantas a nadie que te ponga una mano encima por eso, eres una mala mujer.


Se es una mala mujer según la otra, según la suegra, según la gente, según todos aquellos que llevan el guión de tu vida, se es una mala mujer porque te pones en primer lugar de tu lista, porque no eres hipócrita, porque eres distinta.


Eres una mala mujer porque no quieres usar tus atributos para un ascenso, o no se las quieres dar al que las pide, porque no soportas el mal trato de nadie, porque confrontas, enfrentas y afrontas. Soy una mala mujer porque me soy fiel a mí primero, porque no nací mustia, porque no vivo de aplausos, ni compromisos, ni dádivas.


Soy una mala mujer porque no me presto a interpretar papeles, porque me rajo el lomo tanto o más que cualquier hombre, porque no aguanto flojos, porque no tolero injusticias, porque no me callo, por eso, brindo por las malas mujeres… Por que existan en este mundo muchas más.